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14.1.08

A la desesperada: quemando tu propia casa

Según informa la revista 'Fortune', las aseguradoras estadounidenses se están preparando para un aumento de reclamaciones por incendios de casas, pero provocados por sus propios dueños ante la imposibilidad de pagar la hipoteca. La revista cita un reciente informe de la Coalición contra el Fraude en los Seguros, financiada por el sector asegurador, según el cual "con miles de dueños de casas luchando con las cada vez más caras letras de las subprime, los inspectores antifraude vigilan estrechamente por si se produce una subida en los incendios provocados por propietarios desesperados que no pueden ya permitirse el pago de las cuotas hipotecarias".
En el estado de California, por ejemplo, la cifra de incendios residenciales de origen más que dudoso se incrementó un 76 por ciento el año pasado en relación al ejercicio anterior. Y en el conjunto del país norteamericano, en las zonas residenciales, donde la crisis comenzó antes, se registró ya un aumento del 4 por ciento en 2006, en contraste con un descenso de entre el 3 y el 6 por ciento en los tres ejercicios precedentes.
Algunos casos ya están probados, como el de Christina Snyder, de 31 años, quien urdió un plan digno de película para quemar su casa y cobrar el seguro. Ofreció 5.000 dólares a una vecina para que le ayudara a incendiar la vivienda haciendo que pareciese una tentativa frustrada de violación. La vecina tendría que declarar a la policía que la había salvado de la casa en llamas tras encontrarla atada y con una camisa con la palabra puta escrita sobre ella. La vecina prefirió contar toda la historia en comisaría.
Del grado de desesperación provocada por la crisis hipotecaria en muchas familias americanas dan idea las cifras disponibles sobre las llamadas atendidas por el teléfono de ayuda abierto las veinticuatro horas del día por la organización Neighbor Works America, que cuenta con el respaldo de la Reserva Federal de EE.UU. Este teléfono recibió durante el último trimestre del año pasado unas 2.000 llamadas diarias.