Google

8.11.06

Microsoft, el peso pesado de todos los tiempos

Para alegría o tristeza de detractores, Microsoft sigue siendo el rey de la informática. (El único quien realmente le puede hacer sombra es Google, pero esa empresa es otra historia). Y mira que muchos han intentado desbancarlo con propuestas bastante originales y tecnológicamente viables (incluso superiores en muchos aspectos), pero ahí sigue.
Se habla de técnicas brutales de Marketing –una de las mas comentadas (mitad calumnia, mitad verdad... todo ingenio) es que la empresa lanza versiones con “fallos” deliberadamente, para poco a poco ir sacando los “parches” o arreglos, con el fin de tener enganchados a sus clientes (tanto consumidores como empresariales), y evitar así que la competencia pueda penetrar en el mercado.
En las empresas tecnológicas, la clave es convertirse en la pieza central de la cadena de valor, asegurando así fuertes barreras de entrada y al mismo tiempo de unos robustos costes de salida. El primero (barreras de entrada o “barriers to entry” en su equivalente anglosajón), se refiere a los esfuerzos estratégicos y económicos en los cuales tiene que incurrir la competencia para arañarle cuota de mercado. Mientras en segundo (costes de salida o “switching costs”), remite a las pérdidas que supondría para los clientes actuales si decidiesen pasarse a la competencia.
Desde el principio de la era PC, la estrategia de Microsoft se ha centrado en colocarse como pieza fundamental dentro de dicha cadena de valor, asegurándose pues que sus productos se han convertido en el estándar, a medida que otros agentes (proveedores, socios, clientes... etc.) se han ido incorporando a dicha cadena de valor, y potenciando con ello aún mas el poder de Microsoft.
Esto se traduce en que no ha parado de presentar sólidos resultados financieros año tras año durante las últimas dos décadas (y eso a pesar de que sus productos –para muchos- son más malos que el hambre).
Los últimos resultados que ha presentado han llegado incluso a sorprender favorablemente a la comunidad financiera. Y ahora, tiene previsto el lanzamiento de su nuevo sistema operativo, el Windows Vista, que presenta varias novedades: un buscador interno más poderoso –para competir contra Google-, anti-spams, y varias mejoras en el Office. Luego, su división de entretenimiento, encabezado por la videoconsola X-box, podría verse beneficiado por el retraso en el lanzamiento de la PS3. Y finalmente, un paso decisivo de aliarse con Novell para juntos comercializar sus productos sobre sistema Linux. (Un buen año, sí señor,... tanto que Bill Gates ha decidido comprarse un hotel, junto a su buen amigo, el príncipe Alwaleed).
Todos estos beneficios enseguida se han visto reflejados en la cotización de Microsoft, que desde el verano ha experimentado un fortísimo rebote técnico; y tras rebasar la barrera psicológica de los 28,00 dólares, va con paso firme a la conquista del techo de su canal alcista, hacia los 32,00 dólares.